lunes, 20 de febrero de 2017

Un hombre afortunado. John Berger


Un viaje a un remoto lugar, aparentemente abandonado pero lleno de vida, como cada rincón... Un viaje a la atención domiciliaria. Un viaje a cada casa, a cada historia de cada una de las personas en el medio rural, donde se nos plantea cuánto vale una vida... Y en el camino una actitud, una forma de trabajar y de vivir con y para los demás. La última página no podrá dejarte indiferente. Cada una de las fotografías de Jean Mohr que ilustran este ensayo, son por sí mismas, una historia que contar...

"Después de que su enfermedad ha recibido un nombre, lo primero que suelen preguntar los pacientes es: ¿y cuánto tiempo tardaré...?, ¿cuánto tiempo tendré antes de...?, ¿cuánto tiempo?, ¿cuánto tiempo? -y el médico responde que no puede prometer nada, pero... Puede parecer que controla el tiempo, de la misma manera que, en ocasiones, el marino parece gobernar el mar. Pero los dos, el médico y el marino, saben que no es más que una ilusión."

"Sassall es, sin embargo, un hombre que está haciendo lo que quiere hacer. O, para ser más precisos, un hombre que sabe lo que busca. A veces la búsqueda entraña tensión y contrariedades, pero constituye su única fuente de satisfacción. Al igual que los artistas o que cualquiera que crea que su trabajo es la justificación de su vida, para los estándares miserables de nuestra sociedad, Sassall es un hombre afortunado."

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